Mi primer contacto con una computadora fue una PC con Windows 3.0, con una interfaz gráfica poco amigable, donde tenia que usar MS-DOS para poder acceder, mi primera computadora fue una Windows 98, de tan sólo 56 MB de RAM, con 533 MHz de Procesador y 10GB de disco duro, tuve luego mas PC’s, pero siempre me llamaron la atención esas computadoras hermosas, llamativas, con un estilo único, diferentes, las de la manzanita, transparentes o de colores que ninguna PC tenia, pero eran demasiado elevados sus precios, con el tiempo supe que no eran tan usadas, que Windows era lo que reinaba y así me mantuve durante años, siendo un Windowsero, probando Linux, Solaris, pero nada me convencía.
Pero esta historia no es sobre Windows, las Macs fueron algo que no pensaba tener porque era caro, porque mejor armaba mi PC y era mas barato, llegue a probar Snow Leopard de manera emulada, y fue difícil puesto que nunca había tocado una Mac, quería poder programar para iPhone pero fue hasta años mas tarde que paso.
Luego de tener durante mucho tiempo un iPod Touch y iPad 2, quería desarrollar para estos pero no podía hacerlo sin tener una Mac, había estado asistiendo a eventos de tecnología y programación, sabia que donde estaba el éxito era en la apps para iPhone, así que mi meta fue conseguir una MacBook Pro, y ese día llego:
Me costo unos días adaptarme al teclado, al uso de aplicaciones y mas cosas, pero algo aprendí, las apps no podrían ser tan fáciles de usar y tan vistosas como en MAC OSX es, los gestos multitactiles son naturales, aun hay cosas que extraño de Windows, pero poco a poco he ido cambiándolo, tanto que he estado escribiendo desde mi MacBook Pro estás historias, excepto la de iPad 2 que en su mayoría escribí ahí mismo.
Esta nueva experiencia en Mac no ha terminado, estoy aprendiendo Objective-C muy diferente a mis conocimientos de C#, pero seguiré desarrollando y ahora será en iOS, sin duda Apple dio un gran giro a mi vida con sus productos, sin olvidar a Steve Jobs pero esa será otra historia, gracias por leer.
Hace un par de años, allá en el 2006, tuve mi primer interés en tener un producto de Apple, ya conocía las iMacs pero era usuario de PC’s, y con gran interés en tener un buen reproductor de música, había tenido walkman, discman y reproductores de MP3, pero era hora de algo nuevo, un producto que era la sensación, en cuanto vi uno y sabia que podría tener toda mi música en un solo lugar quise tener uno. Así fue como conseguí un iPod Video de quinta generación, de 60 GB para ocupar el mayor espacio.
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